Un propulsor de 150 CV, sea diésel o gasolina, tiene que gastar un mínimo de combustible a poco que no seas lo suficientemente “cariñoso” con el acelerador. Para comprobarlo hemos probado un BMW X1 en su versión 18d y con la tracción total xDrive, lo que en teoría debería añadir alguna que otra décima demás a su consumo medio de combustible. ¿Cuál habrá sido el resultado de nuestra clásica prueba de consumo? Lo comprobamos a continuación.
BMW X1: consumo real
Esta variante 18d está dotada con un bloque de gasóleo con una cilindrada de 2 litros que entrega una potencia de 150 CV. En este caso, la mecánica va asociada a una tracción total xDrive y a una caja de cambios automática de ocho velocidades.
Según las cifras oficiales, esta combinación en concreto arroja un consumo medio de combustible de 4,7 l/100km, exactamente lo mismo que la versión con transmisión manual de seis velocidades. ¿Qué pasará en la realidad?
Pues que esa realidad ha sido “clavada” por el fabricante bávaro. Tras un recorrido de 100 km en el que hemos mezclado a partes iguales autopista, carreteras secundarias y vías urbanas, el ordenador de a bordo nos ha indicado que hemos consumido una media de 5,1 l/100km.
Pero el surtidor de la estación de servicio ha determinado que el consumo medio ha sido de 4,7 l/100km, menos de lo que nos ha dicho el ordenador de a bordo (algo que hasta ahora solo nos había sucedido con el Kia Rio) y justo la cifra homologada por BMW.
Eso sí, sin utilizar el cambio en modo secuencial o hacer una conducción deportiva, en cuyo caso calculamos que el consumo medio del ordenador podría subir hasta los 6,5 l/100km, aproximadamente. Las diferentes cifras de consumo quedan, por lo tanto, de esta forma:
- Consumo oficial: 4,7 l/100km.
- Consumo según el ordenador de a bordo: 5,1 l/100km.
- Consumo real según nuestra prueba: 4,7 l/100km.
¿Cómo realizamos esta prueba?
Para llevar a cabo esta prueba de consumo hemos trazado una ruta de 100 kilómetros que transcurre a partes prácticamente iguales por autovía y autopista, ciudad y carreteras secundarias. Lo que hacemos es llenar el depósito hasta que este no admite ni una gota más de combustible. De esta forma, cuando volvamos a la estación de servicio y llenemos de nuevo del depósito de combustible hasta que no quepa nada más, el surtidor nos revela cuántos litros ha consumido en una conducción lo más mixta posible.
Conclusión
Como comentamos en la comparativa con el BMW Serie 3, este BMW X1 xDrive 18d automático es un coche más que apto para circular por la ciudad gracias a la facilidad de acceso y de cargar cosas que ofrece debido a su altura, a su espacio interior y a un maletero que tiene una capacidad de 505 litros. Además, el consumo medio de combustible es más que razonable, y permite aventurarse en viajes largos de carretera y/o autopistas con plenas garantías, así como vivir alguna pequeña aventura fuera del asfalto.
- Nota de la prueba de consumo de Carnovo: 10.
