Es una realidad que los SUV acaparan un gran número de ventas en el mercado, hasta el punto de poner en jaque a otros segmentos líderes hasta hace unos años, como el de las berlinas. Dos de los últimos modelos en llegar han sido el SEAT Ateca y el Peugeot 3008. Dos todocaminos que tienen…
Es una realidad que los SUV acaparan un gran número de ventas en el mercado, hasta el punto de poner en jaque a otros segmentos líderes hasta hace unos años, como el de las berlinas. Dos de los últimos modelos en llegar han sido el SEAT Ateca y el Peugeot 3008. Dos todocaminos que tienen todo para triunfar, cada uno a su manera. El modelo español apuesta por la funcionalidad y la practicidad, con una estética más convencional y un comportamiento en carretera más parecido al de un turismo. En cambio, el francés busca más emocionar al público con un diseño más llamativo y original, tanto exterior como interior, con un nivel de acabado ligeramente mayor que en el Ateca.
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Exterior
Las diferencias entre el SEAT Ateca y el Peugeot 3008 comienzan ya a simple vista. El SUV español muestra una imagen más conservadora, siguiendo el lenguaje de diseño que introdujo el León, modelo del que deriva. En el frontal luce una gran parrilla horizontal, con el logo de la marca bien grande y unos grupos ópticos que recuerdan mucho a los del León, con una atractiva firma luminosa LED. El paragolpes tiene una toma de aire en forma trapezoidal inversa a la parrilla, lo que le da un punto de originalidad al conjunto. En la vista lateral, destacan los pasos de rueda cuadrados, un elemento que le diferencia del resto de sus competidores, también del Peugeot. La zaga es bastante sencilla, con las ópticas horizontales que también pueden tener iluminación LED.
Por su parte, una de las bazas del Peugeot 3008 es precisamente el apartado estético. Luce un diseño llamativo, diferente, que puede gustar o no pero que nadie puede discutir que es innovador. Empezando por la parte frontal, destaca la parrilla vertical con elementos cromados que le dan tridimensionalidad y, sobre todo, las formas de los faros, muy rasgados y con una mirada muy afilada. Visto de perfil, llama la atención también el diseño del pilar C que da la sensación de “techo flotante” y unos pasos de rueda elevados. Por último, en la parte trasera luce unos originales pilotos con forma de garra, integrados en un elemento horizontal que recorre la zaga de un extremo a otro.
Interior – SEAT Ateca vs Peugeot 3008
Pero no acaban en el exterior las diferencias entre ambos modelos, sino que continúan en el interior y de manera muy notable. El Ateca muestra un habitáculo más sobrio y convencional, pero práctico y funcional, donde gana a su contrincante en ergonomía. Como ocurre con todos los modelos del Grupo Volkswagen, todos los botones e instrumentos están perfectamente ordenados y colocados al alcance del usuario. El salpicadero guarda mucho parecido con el del León, con la pantalla del sistema multimedia al centro, con algunos botones de funciones más básica, flanqueada por las tomas de ventilación. Debajo queda la consola central con los mandos del climatizador y algunos interruptores, por ejemplo, para las luces de emergencia.
La sensación de calidad percibida es buena, aunque no tanto como en el Peugeot. El volante tiene una forma completamente redonda, a diferencia del 3008, que es achatado. El cuadro de instrumentos se ve por dentro del volante y presenta toda la información perfectamente ordenada y visible, con dos esferas grandes para el velocímetro y el cuentavueltas, divididas por una pantalla en medio con el ordenador de a bordo. Los asientos son extraordinariamente cómodos y sujetan muy bien el cuerpo. Opcionalmente pueden ser de piel y pueden tener regulación eléctrica.
Por su parte, el Peugeot luce un interior mucho más llamativo que el modelo español y transmite una sensación de calidad más elevada. Para empezar, dispone de una instrumentación totalmente digital, con una pantalla de 12’3 pulgadas que, además, está colocada por encima del volante, algo que ya ocurre en otros modelos de la marca francesa. Al ser digital, es posible configurarla en hasta cinco modos diferentes, según el gusto del conductor. Una cosa que llama la atención, aunque no ocurre sólo en este 3008, es que la aguja del cuentavueltas gira en el sentido contrario a lo habitual, algo que puede resultar extraño al principio.
Para que el cuadro de instrumentos se pueda ver por encima del volante, éste debe ser más pequeño. Y así es. El volante del 3008 tiene unas dimensiones mucho más reducidas que el del Ateca, además de un diseño achatado, tanto en la zona inferior como en la superior. Desde el punto de vista de la imagen, puede resultar atractivo, pero requerirá de un poco de tiempo para acostumbrarse.
Por otro lado, el salpicadero tiene unas formas más barrocas y luce una pantalla táctil en el centro que puede ser de 8 pulgadas, desde la que se manejan diferentes funciones del vehículo. Sin embargo, el hecho de hacer todo desde la pantalla, hace que se tarde mucho en ejecutar algunas funciones, como cambiar la temperatura del climatizador, algo que se hace de forma más rápida en el Ateca. En este sentido, el SUV de SEAT resulta más funcional, aunque estéticamente pierda la batalla ante el modelo francés. Debajo de la pantalla hay una fila de botones dispuesto en posición horizontal que sirven para activar funciones del navegador, climatizador, teléfono y radio.
En cuanto a habitabilidad, ambos son bastante semejantes. El Peugeot es unos centímetros más grande que el SEAT pero no ofrece un mayor espacio en su interior. En las plazas traseras, el 3008 gana al Ateca en altura al techo, al ser un poco más grande, pero el español es ligeramente más amplio en las piernas y hombros. En cualquier caso, nada que determine la compra de uno y otro. Como tampoco el maletero. El SUV galo ofrece 520 litros, mientras que el español algo menos, 510 litros de capacidad.
Motor y Conducción
En el capítulo de motores encontramos algunas semejanzas entre ambos modelos. Los dos pueden equipar un motor de gasolina con sólo 3 cilindros. En el caso del SEAT, se trata de un 1.0 TSI de 115 caballos, mientras que el Peugeot monta un 1.2 Pure Tech con 130 caballos. la diferencia de potencia y cilindrada se traduce en un poco más de par y, por tanto, mejor respuesta en bajas del 3008. Sin embargo, el Ateca obtiene unos consumos algo más reducidos con ese bloque.
La gama del SUV francés se completa con otro propulsor de gasolina 1.6 THP de 165 caballos y dos diésel, un 1.6 BlueHDI de 120 caballos y un 2.0 BlueHDI con 180 caballos. En cambio, el SEAT Ateca dispone de una oferta mucho más variada. En gasolina, además del 1.0 TSI, hay un 1.4 TSI con 150 caballos. En diésel, se puede elegir entre el 1.6 TDI de 115 caballos, el 2.0 TDI con 150 caballos o el 2.0 TDI con 190 caballos. Según versiones, los motores pueden ir asociados a un cambio manual de seis marchas o automático DSG de doble embrague y siete relaciones. En el caso del Peugeot, además del cambio manual de seis velocidades, también dispone de uno automático, también de seis marchas, denominado EAT.
Entrando a valorar el apartado dedicado a la conducción, lo primero que hay que destacar es que el SEAT Ateca ofrece un comportamiento más parecido a un turismo. Se muestra más dinámico que su rival, especialmente a la hora de afrontar tramos de carreteras viradas, donde entra en las curvas más plano. Cierto es que tiene un centro de gravedad más elevado que, por ejemplo, un León, pero se muestra bastante estable, gracias a un chasis muy equilibrado, con unas suspensiones más bien firmes y una dirección muy precisa e informativa.
El 3008, por su parte, muestra un comportamiento más cercano al de otros SUV del mercado. En autovía es muy agradable y confortable, ya que cuenta con un esquema de suspensiones que tiran a blandas, algo que, por otra parte, es muy común en los coches franceses. Pero esto hace también que los balanceos de la carrocería se dejen notar con más facilidad. A cambio, ofrece una mayor calidad de rodadura y un mayor silencio de marcha que el SUV español.
Otra diferencia entre ambos modelos es que el Ateca puede equipar tracción a las cuatro ruedas, mientras que el 3008 sólo está disponible con tracción delantera. Aunque esto no debería ser tampoco un argumento de peso que determine la elección de uno u otro, ya que la inmensa mayoría de los compradores de este tipo de vehículos les da un uso preferentemente en ciudad y autovía. No obstante, por si acaso, el Peugeot puede contar con el sistema Advanced Grip Control que actúa sobre el control de tracción para mejorar la adherencia en superficies irregulares.
Ayudas a la conducción y equipamiento tecnológico
En cuanto a equipamiento tecnológico y ayudas a la conducción, ambos modelos están perfectamente a la última. En primer lugar, el Ateca puede equipar dos sistema multimedia diferentes: el más básico, Radio System Media Colour, con una pantalla de 5 pulgadas, y el Radio System Media Plus que incluye la pantalla de 8 pulgadas, además de conexión USB, tarjeta SD y es compatible con Apple Car, Andoid Auto y Mirror Link. Su uso es más rápido y sencillo que en el Peugeot 3008.
Entre los sistemas de seguridad y ayudas a la conducción, puede contar con el programador de velocidad activo con asistencia a la conducción en el tráfico, el reconocimiento de señales, el detector de tráfico cruzado, la frenada de emergencia con detector de objetos, detector de vehículos en ángulo muerto, la frenada automática después de una colisión o las cámaras que proporcionan una visión cenital para facilitarla maniobra de aparcamiento. Es un equipamiento que prácticamente coincide con su rival francés.
Algo que no tiene el 3008 y sí el Ateca es la opción de la tracción a las cuatro ruedas 4Drive, así como las suspensiones adaptativas disponibles para las versiones Xcellence, Xcellence Plus y FR y siempre con la tracción total. Estas suspensiones permiten variar la firmeza de los amortiguadores y disminuir la altura al suelo del coche en hasta 10 milímetros, según tres niveles que puede seleccionar el conductor: Confort, Normal y Sport.
El Peugeot 3008 prácticamente se puede decir que coincide en equipamiento de seguridad con el SUV español. Puede disponer de programador de velocidad adaptativo, que incluye función de parada y arranque, el detector de vehículos en ángulos muerto, el aviso de cambio involuntario de carril, el sistema de aparcamiento asistido o un conjunto de cámaras con visión cenital para las maniobras de aparcamiento.
El SUV galo no dispone de suspensiones adaptativas pero sí de un sistema llamado Driver Sport Pack, una opción que permite modificar la dirección, la respuesta del acelerador y del cambio automático para una conducción más dinámica. Aunque hay que decir que, incluso con este sistema montado, no alcanza al Ateca en firmeza y dinamismo. Tampoco hay que olvidar el mencionado Advanced Grip Control, que mejora la adherencia en superficies más difíciles.
Por último, el 3008 cuenta también con una pantalla táctil de 8 pulgadas con un sistema de infoentretenimiento bastante completo, con un funcionamiento un poco más complejo y menos fluido que el del SEAT, pero con buena respuesta y resolución y es también compatible con Apple Car y Andoid auto.
Precio y Veredicto
El SEAT Ateca parte de los 21.650 euros y está disponible en seis niveles de equipamiento: Reference, Style, Style Plus, Xcellence, Xcellence Plus y el más deportivo FR. Por su parte, el Peugeot 3008 arranca desde 25.700 euros. A igualdad de equipamiento y motor, el SUV francés es ligeramente más caro que el español. Ambos ofrecen casi lo mismo, pero el Peugeot ataca directamente a un público que busca algo diferente, distinguirse del resto, sin importarle pagar un poco más, mientras que el SEAT prioriza la practicidad y la funcionalidad. Los dos van muy bien, pero el Ateca es el que más se parece a un turismo del segmento C.
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